Política exterior vecinal

Carta
El Mercurio, 21.10.2018
Fabio Vio Ugarte, embajador (r) y ex Director General de Política Exterior

La situación producida recientemente en un sector aún no demarcado de Campo de Hielo Sur ha llevado, con razón, a algunos a expresar su preocupación.

Es evidente que la relación en materia de límites fronterizos con nuestros vecinos no ha sido fácil, y a veces ha sido muy compleja. Por esta razón, es fundamental insistir en la necesidad de otorgar a la política vecinal un tratamiento verdaderamente prioritario e integral.

La base fundamental de esta política debe estar en una real integración económica, política y social. Con Perú y Argentina hemos tenido avances extraordinarios. Bolivia, a pesar de los gestos inamistosos de Evo Morales, realiza lo principal de su comercio internacional utilizando las facilidades extraordinarias que le da el Tratado de 1904. Es decir, la creación de intereses comunes en el plano económico, cultural y de inmigración es un seguro que impide confrontaciones inútiles.

Sin embargo, esta integración tendrá siempre una sombra si no se adoptan medidas adecuadas. Con Argentina tenemos que avanzar en la demarcación de la zona pendiente en Campos de Hielo Sur, aun con las dificultades que esto representa. Es un tema pendiente que puede transformarse en un peligro para las excelentes relaciones existentes. Con Perú es necesario conversar sobre las diferencias que tenemos frente al mal llamado "triángulo exterior" y el incumplimiento de la adecuación de la ley interna peruana respecto del fallo de La Haya. En cuanto a Bolivia, quienes creen que con el fallo reciente se terminaron sus aspiraciones marítimas están equivocados, pues tienen un imperativo constitucional de seguir insistiendo.

Por esta razón, es más necesario que nunca mantener la posición de serenidad que se ha adoptado después del fallo y observar con atención los movimientos de Evo Morales.

Por último, debemos insistir en la necesidad de denunciar el Pacto de Bogotá con el objeto de evitar que nos lleven obligadamente a litigios artificiales. Asimismo, reforzar nuestra acción diplomática profesional y la política de disuasión con FF.AA. respaldadas y modernas.

No hay comentarios

Agregar comentario