Entrevista (Carolina Valdivia T., abogada y exsubsecretaria de RREE) ExAnte, 17.04.2024 Marcelo Soto
La ex subsecretaria de RREE y canciller subrogante al final del segundo gobierno de Piñera analiza el impasse con Argentina luego de que la ministra trasandina Patricia Bullrich dijera que hay antecedentes de una supuesta presencia de Hezbollah en el norte chileno.
“Más allá de la reacción del Gobierno de Chile, sí comparto la frustración y el malestar de las autoridades chilenas al enterarse de una noticia de esta naturaleza por la prensa, sin advertencia previa”, señala.
-¿Ha sobre reaccionado el Gobierno ante los dichos de Bullrich? ¿Era necesaria una nota de protesta?
-Las notas de protesta entre países vecinos son poco habituales. Especialmente, con Argentina, pues existen múltiples canales diplomáticos y contactos permanentes entre autoridades para tratar todo tipo de materias, entre ellas las de seguridad. Pero más allá de la reacción del Gobierno de Chile, sí comparto la frustración y el malestar de las autoridades chilenas al enterarse de una noticia de esta naturaleza por la prensa, sin advertencia previa.
-Hasta ahora el tema ha sido una noticia menor en Argentina. ¿La respuesta del presidente termina jugando en contra y en cierta forma dando vitrina a acusaciones aún no comprobadas?
-Me parece que ha habido una sobrerreacción de nuestra parte. La ministra Bullrich no hizo una imputación relativa a que Chile amparase ni albergase grupos terroristas, sino que existía información sobre la presencia de estas organizaciones en el país. Las disculpas ofrecidas esta tarde por la ministra Bullrich dan cuenta de este traspié y las declaraciones de nuestro Gobierno dando por superado el impasse reflejan que fue, al final, un tema acotado.
-El parlamentario de EEUU Marco Rubio señaló supuestas redes financieras de Hezbollah en Chile. Mientras fue Canciller ¿tuvo conocimiento de actividad de este grupo terrorista en el norte u otro lugar del país?
-No, no tuve conocimiento de actividades de ese tipo más allá de lo que se publicaba cada cierto tiempo en la prensa y que solía estar relacionado con las conexiones que podrían existir entre personas investigadas por los atentados de la AMIA en Buenos Aires y nuestro país.
-El embajador de Chile en EEUU Juan Gabriel Valdés calificó como “insulto a los chilenos y una falta de respeto de una democracia a otra” lo señalado por el legislador estadounidense. En tanto, la PDI descartó la presencia del grupo terrorista. ¿Se podría haber manejado con mayor cautela este tema?
-Me parece que los dichos del senador Rubio obedecen a la dinámica de la política interna en Estados Unidos. El senador Rubio es representante del Partido Republicano por Florida, uno de los lugares que alberga la mayor cantidad de judíos americanos en Estados Unidos. Entonces es en parte un guiño a sus votantes, para quienes la defensa del Estado de Israel de sus enemigos declarados, como Hezbollah, y la alianza de hierro con Estados Unidos, es determinante a la hora de decidir el voto. A ello se suma la percepción que existe en EEUU respecto a cómo Chile ha cambiado su postura histórica al tratar la relación bilateral con Israel.
Ahora, tal como causaron molestia las declaraciones de la ministra Bullrich, también es frustrante que un senador de la influencia de Rubio en las relaciones con Latinoamérica no alerte previamente a Chile de esta información. Eso, supongo, puede haber generado la airada respuesta del embajador Valdés.
-¿Cómo queda la imagen de Chile en el exterior después de todo este episodio que vincula al país con un grupo terrorista, que acaba de atacar a Israel, como Hezbollah? El subsecretario Manuel Monsalve dijo, precisamente, que Bullrich había intentado dañar la imagen del país. ¿Está de acuerdo?
-En las relaciones bilaterales con países vecinos, en especial, hay que mantener la cabeza fría antes de reaccionar. En tal sentido, no me parece que se dañe la imagen de Chile con estas declaraciones pues lo determinante será lo que indiquen nuestras autoridades en seguridad. La ministra Bullrich no hizo una imputación a que en Chile se albergasen grupos terroristas.
Más tarde, tras disculparse con la ministra Tohá, agregó que sus palabras obedecían a un análisis de las conexiones que podrían existir. Insisto, podemos estar en desacuerdo respecto del tiempo y la forma, pero en cuanto al contenido y como ello puede afectar a la imagen del país, debemos atenernos a la fiabilidad de la información que proporcionen nuestras autoridades. Si estas son certeras y asertivas, lo que digan terceros países o sus autoridades, no afecta la imagen del país.
-El presidente venezolano Nicolás Maduro encendió la hoguera cuando dijo que Piñera había abierto las puertas a delincuentes de ese país. Matthei respondió que había sido la izquierda la que se había opuesto a expulsar inmigrantes. ¿Es un juego de suma cero?
-Sí, es suma cero. Las declaraciones de Maduro buscan dar elementos a los partidos de izquierda para trasladar la responsabilidad de la crisis migratoria al presidente Piñera. Lo que es bastante descarado considerando que un cuarto de la población venezolana, equivalente a casi 8 millones de personas, ha salido del país producto de las lamentables condiciones humanitarias, políticas y económicas en que se encuentra Venezuela como consecuencia de la administración de Nicolás Maduro.
Si bien hubo una oposición muy férrea de parte de miembros de la actual coalición de gobierno a las expulsiones ejecutadas el gobierno anterior, así como a la discusión de la nueva ley de migraciones que impuso mayores restricciones, la responsabilidad final de las expulsiones recae en el Ejecutivo. Y allí, a pesar de todas las dificultades, se logró materializar un número relevante a diferencia de las cifras que vemos hoy. Espero que las fuerzas políticas lleguen a acuerdos que logren encauzar el actual desborde migratorio.
