Necesitamos una Cancillería madura

Columna
La Tercera, 29.04.2023
José Durana Semir, senador por la UDI y exgobernador de Arica

Cuando más se necesitan Perú y Chile para detener la crisis migratoria y humanitaria que lleva semanas suscitándose en el Límite de la Concordia, más distanciados están ambos gobiernos, por la natural molestia provocada en nuestros vecinos tras las críticas de Boric contra la Mandataria peruana.

Cuando más se necesitan de acciones concretas y bilaterales, nuestra diplomacia sigue desorientada, novata y extraviada en generalidades. La misma ineptitud que permite a la carga boliviana usar caminos ariqueños hacia puertos peruanos y que años atrás despojó a Arica de su mar patrimonial, conduciéndonos a un juicio con Bolivia y actuando a espaldas de los intereses de los ariqueños y de las comunidades aymaras en el altiplano.

La crisis migratoria que vive Arica no es la primera, pero antes al menos había un gobierno que, con firmeza hacia el interior y diálogo fraterno con Perú, canalizaba los problemas y alcanzaba soluciones rápidas sin necesidad de los escalamientos de estos días. Incluso y a pesar de la hostilidad de la oposición política, entonces se mantuvieron canales abiertos y eficientes con gobiernos de otro signo de la región en temas migratorios.

Arica y Tacna tienen una tradición de encuentro, entonces, debemos reforzar ese diálogo casi centenario para abordar juntos la crisis, como en 2019. Para ello, es necesario que la cordialidad fronteriza sea complementada por una activa política de reconciliación chileno-peruana y que nuestra Cancillería abandone su extravío, a propósito de nuestros vecinos del norte y deje la complacencia con el gobierno de Arce; que incluso solidarice con Perú ante su legítima demanda a propósito de la presidencia de la Alianza del Pacífico.

Como senador de la República estoy dispuesto a trabajar para restablecer los vínculos de encuentro fraterno entre Chile y Perú, para trabajar conjuntamente y enfrentar con la eficacia de años atrás, problemas comunes. Para eso, necesitamos un gobierno despierto, maduro, y una Cancillería que salga del receso, madure y defienda los intereses de Arica.

No hay comentarios

Agregar comentario