Carta La Tercera, 05.01.2020 Fabio Vio Ugarte, abogado y ex director general de Política Exterior
Sin lugar a dudas este año 2020 será extraordinariamente difícil en cuanto a desafíos en la política exterior de Chile. El país dejó de ser el referente y ejemplo de estabilidad democrática y respeto del estado de derecho de América Latina.
El gran desafío de la diplomacia chilena es estructurar y aplicar una política inteligente y dinámica para revertir esta realidad. Para esto, es fundamental activar la diplomacia profesional, que tiene la experiencia y el conocimiento en esta materia. Hasta ahora hemos observado solo algunas iniciativas aisladas y reactivas.
Es fundamental una mayor presencia del Ministerio de Relaciones Exteriores en la toma de decisiones de las políticas internas de Chile. Hoy aparece en un segundo plano injustificado.
Asimismo, es trascendente una estrategia para enfrentar la nueva realidad regional y especialmente vecinal. Argentina, Bolivia y Perú viven momentos de cambios fundamentales. Nada más negativo sería que se apreciara por ellos un Chile débil e inestable. Para esto es esencial acentuar nuestra acción en los organismos regionales y en la ONU. Debemos dejar de ser un país condicionado por informes de diferentes entes de DD.HH. los que evidentemente no reflejan la realidad que vive Chile. En todos los foros y ante las diferentes cancillerías hay que reiterar nuestro apego a la democracia, al estado de derecho, a la libertad económica y desarrollo social, y rechazar las declaraciones indebidas de gobernantes de países extranjeros en nuestros asuntos.
Evidentemente, todo esto debe estar acompañado de un desarrollo armónico de la vida interna del país, evitando que la acción vandálica de una minoría produzca un mayor e irreversible perjuicio, y evitando la multiplicación de acusaciones e interpelaciones injustificadas en el Parlamento.
