Homenaje póstumo a Arturo Alessandri Besa

Columna
El Líbero, 30.07.2022
Eduardo Rodríguez Guarachi, embajador (r) y primer Encargado de Negocios de Chile en Singapur

Hoy quiero transmitir un sincero, profundo y doloroso homenaje a quien participara de forma notable en la historia y construcción de nuestro país en su historia reciente y sus valores democráticos. A un destacado político, gran amigo, destacado jurista y padre de familia; pero tal vez lo más relevante fue su calidad de ser humano. Un incansable luchador que dejó en alto el nombre de nuestro país en lugares que antes nos parecían tan lejanos como el Asia Pacífico, donde logró además sentar los cimientos para construir un puente a través de este océano que hoy nos convierte en importantes vecinos.

Arturo Alessandri Besa sin duda alguna deja un gran vacío en la historia moderna de nuestro país, y cómo no, cumpliendo con el legado y tradición que se encuentra escrita a fuego en los anales de nuestra historia

A modo personal, tuve el privilegio de conocerlo a través de mi querido suegro, Max Burr Rodríguez. En ese entonces, tuve la fortuna de proponerlo, y posteriormente nominado Cónsul Honorario de Singapur en Chile desde febrero de 1983, un rol clave para el acercamiento que pretendíamos materializar hacia el Asia Pacífico, en una época políticamente difícil para nuestro país, donde precisamente personas como él marcaban una diferencia con visión de Estado. Su mirada hacia el Pacífico y labor como Cónsul fueron de suma importancia para la iniciación de las relaciones comerciales que se comenzaban a establecer en esa zona, y que hoy, décadas más tarde, podemos ver cómo han crecido y profundizado, basándose en una visión común de apertura comercial y economía social de mercado.

En 1990, y tras 7 años de brillante trabajo, lo reemplazó su hijo Arturo Alessandri Cohn, quien ha mantenido esta encomiable tradición diplomática de excelencia.

Por ello, y muchas otras razones que sería muy largo de enumerar, no puedo dejar de agradecer a mi entrañable amigo y a su familia, ya que siempre fue un guía por su inteligencia, dignidad, modestia y simpatía. Por último, y recordando siempre la Ciudad del León -Singapur-, el suscrito y muchos más lo recordarán como un hombre que vivió su vida con plenitud y un ejemplo a seguir.

No hay comentarios

Agregar comentario