Trump oculta algo que lo ata a Putin

Columna
El Día, 21.07. 2018
Jorge V. Ordenes Lavadenz, columnista boliviano

En la cumbre de Helsinki del lunes 16 de julio Trump por alguna razón rindió un culto inusitado y vergonzoso a Putin por razones que se desconocen. Quizá tengan que ver con asuntos de propiedad inmueble en Rusia o en otra parte, o quizá con los entreveros cibernéticos que involucran a los rusos en las elecciones presidenciales de EEUU de 2016, lo que está comprobado por los pliegos de cargo emitidos a varios colaboradores republicanos de la campaña de Trump en 2017, y por el pliego emitido el jueves 12 de julio por el Departamento de Justicia contra doce oficiales rusos acusados en detalle de haber sido responsables de los ataques. El WP dice que Trump ha ido de su “hacer nuevamente grandioso a EEUU,” a “hacer grandiosa a Rusia.” Y su empeño parece enceguecido y hasta apátrida porque ha puesto los intereses de Rusia primero, lo que deja, incluso a gente de su partido, con la boca abierta.

Trump está ayudando a cristalizar el sueño de Putin de hacer de su país un emporio dictatorial como la URSS... y en eso no cesa, aunque no será fácil porque, entre otras cosas, el producto interno bruto de Rusia es más o menos del tamaño del de Texas, y si bien tiene un arsenal nuclear, sus FFAA convencionales ya no son las de la URSS. Obama caracterizó a Rusia como “fuerza regional”... lo que nunca cayó bien a Putin. Pero por alguna razón, Trump, haciendo de “idiota útil” como lo califica la prensa estadounidense, lo trata de igual a igual, como “un competidor de mi talla”...lo que sí añade “talla” política a Putin en Rusia donde seguramente quisiera ser reconocido como “Vladimir el Grande,” bagaje de inverosimilitudes que deja pasmados a muchos no solamente estadounidenses.

El Secretario General de la OTAN, general Hastings L. Ismay , recientemente dijo que la Organización se había creado “para mantener a la Unión Soviética fuera, a los americanos dentro y a los alemanes abajo” militarmente... lo que 7 décadas después se ha logrado con los alemanes elevados económicamente, con el mundo que hasta la llegada de Trump había comerciado cada vez más y mejor, y con la ciencia alcanzando lo impensado. Pese a esto Trump, entre otras cosas, duda de que la OTAN sirva... lo que resulta inverosímil sobre todo cuando el lunes, en Helsinki, se sometió al zafarrancho sicológico de Putin que lo demolió hasta el punto de hacerlo aceptar increíblemente la idea prepotente del ruso de someter el pliego de cargos contra los oficiales rusos nada menos que ¡al escrutinio de investigadores rusos! de modo que se determine ¡la calidad de los cargos! Grotesco y hasta traicionero a la patria.

Occidente hasta ahora ha sobrellevado las embestidas de Trump y, pese a la confusión del Brexit, y a las dificultades de gobernabilidad de los líderes alemanes, de los italianos y españoles, la UE se va percatando de que “la unión hace la fuerza,” y que unirse mejor deber ser prioritario ahora que la mayoría de las economías europeas se recuperan, y que el presidente E. Macron alienta el cometido de una Europa unida pese a Trump y sus inquietudes ahistóricas e incluso aberrantes. El Pentágono por su lado, por lo menos hasta el momento, ha continuado la política del presidente Obama de reforzar militarmente a la OTAN en los países del mar Báltico y Polonia. Antes de la reunión de la OTAN de la semana pasada, el otro yo de Trump había dicho que garantizaría la integridad territorial de los países del Báltico, Noruega y Dinamarca. Veremos.

No hay comentarios

Agregar comentario