Columna El Montonero, 29.04.2021 J. Eduardo Ponce Vivanco, embajador (r) y ex viceministro de RREE peruano
La ideología de Perú Libre liquidaría la libertad y la democracia
El dilema de la segunda vuelta electoral puede ser definido a favor de los peruanos o en su contra. Será responsabilidad de los electores optar por nuestro futuro entre dos cartas claras y antagónicas: el “populacherismo” irresponsable de Castillo versus la conocida y controversial carta de Keiko Fujimori. No habrá lugar a confusiones. Las escapatorias anticívicas del voto blanco, viciado o el ausentismo –que serán de menor cuantía– jugarían en favor de la carta filocomunista.
Como dijo Juan Carlos Tafur en RPP (“Nada está dicho”), el revoltoso profesor chotano de escuela primaria y discurso “prodestrucción” hace una eficiente campaña en favor de Keiko Fujimori en frentes importantes de la lucha política. Pero no basta ante la cantidad de incautos y resentidos que podrían votar por el “Profe” o el marxismo-leninismo trasnochado de Perú Libre. Ella tiene que hacer una audaz campaña por y contra ella misma.
Una campaña contra sus propios errores, los de su padre, los de Fuerza Popular y los cargos reales o fantasiosos de corrupción que pesan sobre cada elemento de ese conjunto. Además, ha perdido su importante bastión en Norte del país y el apoyo mayoritario de mujeres y jóvenes.
Pero hay soluciones que podrían hacer camino. La primera y más importante es el compromiso solemne que debería firmar ante la Nación. Eso que llaman “hoja de ruta”, pero en serio.
La falta de apoyo mayoritario entre las mujeres –inferior al que tiene entre los hombres– ocurre también entre los jóvenes, a pesar de que ella todavía lo es. Son dos pájaros que se podrían matar con la misma bala: en su bancada tiene a la brillante y carismática morena, Rosángela Barbarán, quien podría organizar una agrupación femenina multipartidaria y juvenil con Adriana Tudela y Rosselli Amuruz, incluyendo a jóvenes talentosos como Alejandro Cavero.
El debate de Keiko con el candidato rondero en la propia cancha del comunista cajamarquino debería ser seguido de una intensa campaña para reconquistar el Norte que tanto pesa en las elecciones. Especialmente si se trata de contrarrestar el enrarecido apoyo que el fujimorismo tiene en el Sur y en el Centro del país.
Dada la trágica prioridad de la pandemia y la orfandad de Castillo en ese campo urgente y decisivo, ella podría anunciar el inicio de contactos internacionales para que tan pronto asuma el gobierno venga una misión de expertos israelíes en la lucha contra el COVID-19. No solo por el éxito con que Israel ha derrotado la epidemia, sino también por la orientación similar que seguiría Fuerza Popular en su política sanitaria al respecto.
Finalmente, sería oportuno que Keiko revele quiénes serían los principales políticos y los cuadros técnicos que la acompañarían en el gobierno multipartidario que ha anunciado en más de una ocasión. Además de fortalecerla como opción electoral, esta información desnudaría la orfandad de su contrincante en un plano fundamental para la gestión pública.
